Qué quedará en la historia de este tiempo en que el mundo se desaceleró. Quizá, las víctimas y las pérdidas causadas por el coronavirus Covid-19 se lleven todas las miradas. Pero ¿cómo se contará este tiempo circular, este extraño deja vu?. Sin duda, para eso está el arte y, en especial, la poesía. De ella depende el poder de poner en palabras las sensaciones, las emociones y los dolores que van atravesando estos momentos.
Este poema de Leandro Murciego cuenta algo de esa extraña sensación de ya haber vivido todo y de saber que mañana sucederá lo mismo, o muy parecido.

Esta soledad, que ahora llamo cuarentena,
me pesa tanto como el recuerdo de tu sonrisa.
Todas las lapiceras se declararon en huelga.
Los versos empezaron a corretearse por toda la casa.
Solo atino a mirarlos. Ya no les digo nada.
Me ahogan tanto las páginas blancas como las sábanas.
No hay indicios de nuevos poemas.
Ahora cada vez que salgo,
como Bukowski,
doblo la esquina y estoy siempre en la misma calle.
Leandro Murciego
(Moebius)
