Salvador Negro estuvo en Noche de Letras 2.0 y nos dejó declaraciones como estas:
“Somos una palabra que forma parte de esa palabra de los otros, y vamos construyéndola entre todos”.
“La etapa de escritura pública lleva tan sólo 2 años, mientras que la otra lleva más de 20…. En este lapso, mi gran maestro fue Jorge Luis Borges. A él le pedía consejos, y aunque esto roce la locura, sentía cómo me hablaba dentro de mi cabeza”
“Tuve 2 profesores de literatura: Uno leyó todos mis textos antes de publicar mis escritos, y otro fue Jorge Luis Borges, quien vivía dentro de mi cabeza…”
“No sé por qué salió a la luz esto que trabaje durante 20 años. Quizás debería haber seguido en el anonimato y trabajando”.
“Muchas veces, al escribir los poemas, me siento salvado por la palabra. Salvado de mí mismo”… Salvado de la fugacidad del tiempo, de la voracidad de la materia, de cómo se consume, de lo poco que nos queda… de ser resarcido de la crueldad y de la falta de sentimientos”
“Hay momentos que, al salir el poema, la sensación es mayor, se intensifica. Es como si hubiera hecho pan, hay un alimento y uno se siente satisfecho. De alguna manera uno ha cumplido con su destino”.
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